En un tiempo en el que el mejor juego es el que tiene mayor número de polígonos, y donde la música o es orquestada o suena a tortura gatuna, sucedió un milagro. De repente aparece un juego en el cual el anti-aliasing ni está ni se le espera, no conoce ni de vista a cel-shading, bump mapping, pixel shader o bloom effect, y entre sus amistades no se encuentran orquestas sinfónicas, sino teclados casio. Y a pesar de todo eso, o tal vez gracias a eso, es de lo mejor del año... Érase un robot a un cañón pegado, Mega Man 9.
Pongamonos en antecedentes, Keiji Inafune y Tokuro Fujiwara, ambos de Capcom, crearon en 1987 el videojuego Rock Man (conocido fuera de Japón como Megaman por que un amplificador de guitarra estadounidense tenía el mismo nombre), siendo una aventura plataformera en 2D no lineal, en el sentido que de el jugador podía elegir el orden de las 6 fases que lo componían. Al año siguiente sacaron Mega Man 2, elevando al robot azul a la categoría de leyenda, explotándolo hasta sacar 6 juegos en NES, y con el paso del tiempo para casi todas las plataformas existentes. Incluso dieron el salto a las 3 dimensiones poligonales con la serie de juegos Mega Man Legends, pero algo iba mal, ya no tenía la frescura ni vendía tan bien como al principio.
La saga principal se encontraba estancada en su octava entrega, que vio la luz en 1996 para PSX y Sega Saturn. Era hora de preparar la vuelta de la mascota de Capcom por todo lo alto con Mega Man 9, pero primero había que resolver algunos flecos, como en que consola realizarse, y que aspecto tendría el juego. El tema de la plataforma se zanjó pronto, porque tanto la compañía como Inafune y Takeshita (productores del juego) vieron con buenos ojos la idea de lanzarlo en todas las consolas de sobremesa a través de la descarga digital. El problema vino en cuanto al juego en sí, porque Capcom quería un juego según los estándares actuales, tridimensional y con toda la fanfarria, pero Inafune quería dar a su hijo predilecto la forma que le dio la fama, cumplir el sueño de vestir a Mega Man con sus mejores galas, y eso pasaba por hacerlo en 8 bits.
Capcom pataleó como gato panzarriba, pero al final pudo la constancia y el deseo de Inafune de hacer un juego de 8 bits en pleno 2008 ¿Vuelta al pasado y bajada de pantalones de Capcom? No, simplemente se trata de ser honestos con Megaman, quitarle lo superfluo y dejar que reluzca el gran juegos que siempre fue, y que siempre será. Una apuesta que vuelve a poner sobre el tapete que la esencia de los videojuegos no se halla en gráficos de alta resolución, ni en sistemas de sonido 5.1, ni tampoco en tramas supuestamente adultas, y bajo todo eso se siguen encontrando grandes juegos. Eso no es óbice para que el juego se vea a 480p.
En un primer momento Capcom anunció el juego como exclusivo para Wii Ware, pero como ya sabemos que por exclusividad entienden algo distinto al resto de los mortales, pronto lo anunciaron también para el resto de plataformas. Una vez aclarado ese dato, Capcom se dedicó a publicitarlo, causando bastante sorpresa el aspecto del juego. El trailer, que muestra la evolución sufrida por Mega Man y el posterior retroceso a su forma original, hizo que a más de uno se le atragantase el colacao:
Año 200x, Dr Wily arrepentido, tiempos de paz... Pero de pronto sucede una nueva revuelta de Robots Master. Todas las miradas se dirigen a Wily pero jura en hebreo que, esta vez, él no ha sido el culpable. Como prueba de descargo presenta un vídeo en el que el Dr Light, el bondadoso científico, se autoinculpa. Ya se sabe que la masa popular es muy ignorante, y cuando Wily pide ayuda económica para frenar el avance de los Robots, se le concede y acto seguido se arresta al Dr Light. Mega Man, el cañonero azul, luchará sin descanso para desenmascarar al auténtico causante de los estragos (¿alguien duda de quien se trata?) y probar así la inocencia de su creador.
Como base del juego se han tomado las dos primeras entregas de la saga, por lo que Mega Man carece de algunos ataques y movimientos, como la imposibilidad de cargar el cañón o deslizarse. Pero se han introducido una serie de novedades para hacerlo más actual y accesible, como la inclusión de retos (algunos tan utópicos como pasarse el juego sin sufrir daño), contrarreloj con los resultados online, una tienda en la que comprar diversos item como vidas extras (lo que supone un alivio en determinados momentos), y también contenido descargable previo pago, como un nivel extra, o el personaje Proto Man que si posee el Charge Shot y Power Slide.
Al igual que en todo Mega Man, podemos escoger el orden en que completar la aventura, teniendo ocho Robot Master
dispuestos a hacernos sudar la gota gorda. Como novedad, la igualdad también ha llegado al mundo de Mega Man, y tenemos al primer Robot Master femenino, llamado Splash Woman. Tras superar cada fase, aparte de conseguir el arma del enemigo derrotado también obtendremos alguna pincelada de la historia, y como colofón a los ocho Robots iremos a la fortaleza del Dr Willy a acabar lo empezado.
Los aspectos técnicos del juego son 100% NES en el mejor sentido de la expresión. Pixel Art del año 2008, hecho con valentía, mirando atrás con orgullo y afrontando el futuro con garantía de éxito. La música si que es midi, y no Wii Music, y a mucha honra. Hay gente que sufre de sarpullido auditivo al escuchar estas melodías con toque tan añejo, pero son realmente pegadizas y están muy bien hechas. Muchos fans han hecho versiones que demuestran la calidad de los temas más allá de si es un teclado midi o una orquesta. Para muestra, este medley rockero magistralmente hecho por Fredrik Larsson versionando la practica totalidad de las canciones del juego:
Megaman 9 no es el mejor juego del año, ni siquiera mejor que muchos de los juegos de NES. Pero si es una pequeña joya, un beso en la mejilla a todos aquellos que crecimos en los ochenta con una nintendo, un vistazo a las mejores fotos del álbum familiar. Y supone un soplo de aire fresco a una industria cada vez más falta de ideas, y donde se confunden beneficios con calidad, tecnología punta con entretenimiento, y gran presupuesto con creatividad.
Puntuarlo es muy complicado, porque según el esquema clásico no tendría más de 1 o 2 puntos sobre 10, en base a unos gráficos, música y sistema de juegos teóricamente anticuados. Pero si lo que tenemos en cuenta es la capacidad de entretenimiento, el reto que supone jugarlo, y el buen sabor de boca que deja entonces tendríamos que subirle bastantes escalones.
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3 Comentarios:
Algunas personas se toman esto como si fuera una especie de timo, pero lo cierto es, que mas gente de la que parece en el fondo demanda cosas parecidas.
Mas que el poner descargas de juegos de videoconsolas de 8 y 16 bits que todos ya hemos jugado, o maquillarlos con el HD, lo interesante seria el que siguieran por este camino, y realizaran nuevos titulos como este Mega Man, no?
Un saludo ;)
Megaman 9 GOTY 2008
¡Hombre ya!
Técnicamente el juego merece un 10 considerando que ofrece absolutamente todo lo que promete a las expectativas del público.
Además, sus gráficos son excelentes.
¿Que no lo son? Bueno, si uno de los requisitos para tener gráficos de 10 es que los mismos contengan 2 millones de colores en su paleta....
Lo importante no es el forzarnos a apuntar a tecnologías más sofisticadas. Hacerlo hizo que la industria apuntara el 80% de su potencial en el camino equivocado.
Sería bueno empezar a considerar otra escala de valores al momento de juzgar un videojuego.
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